WGNRR Condemns the Dominican Republic’s Chamber of Deputies’ Recent Vote to Uphold the Country’s Total Ban on Abortion
*A continuación en Español
The Women’s Global Network for Reproductive Rights (WGNRR) is alarmed with the New Penal Code recently adopted by the Dominican Republic’s Chamber of Deputies, which eliminates the proposed abortion clause and reinstates its criminalization in all circumstances.[1] The Dominican Republic’s President, Daniel Medina Sánchez, had introduced the 2014 amendment,[2] a laudable attempt to decriminalize abortion in the cases of rape or incest; if the pregnancy poses a risk to a woman’s or girl’s health or life; or in cases where a fetus would be unable to survive outside the womb. Recently the Dominican Republic Congress had the opportunity to demonstrate and reaffirm their commitment to women’s human rights, by re-promulgating and maintaining the amendment.[3] On July 19, 2016, however, the Chamber of Deputies adopted the deplorable New Penal Code which sets out a sentence of two to three years of prison for women who have an abortion or for persons who assist an abortion; four to ten years of prison for medical personnel who provide abortions, and which completely eliminates the 2014 proposed amendment.
If enacted, this New Penal Code will reinforce the total ban of abortion in the country, and be a drastic step backwards in ensuring the health, rights, and lives of women and girls in the Dominican Republic. As we and various Human Rights organizations[4] have stated, and as confirmed by the Special Rapporteur on Violence against Women, the complete criminalization of abortion endangers women and girls’ health and lives.[5] The illegality of abortion has led countless numbers of women to seek unsafe abortions, putting their lives, personal security and health at risk, while exacerbating maternal morbidity and mortality. [6] These kinds of restrictive laws also hinder the work of healthcare providers, as well as that of Women Human Rights Defenders (WHRDs) who work to expand access to safe abortion, as a result of the fear of being criminalized for their work.
Furthermore, the New Penal Code contradicts numerous human rights provisions, such as the Inter-American Convention on the Prevention, Punishment and Eradication of Violence Against Women (Convention of Belem do Para),[7] and the Convention on the Elimination of all forms of Discrimination Against Women (CEDAW)[8] both of which have been ratified by the Dominican Republic. Human Rights Bodies have also stated that forcing a woman to undergo a pregnancy, even when the pregnancy is a result of rape or presents a threat to the woman’s life, is measurable to an act of torture and constitutes institutional violence.[9]
We congratulate the Senate for sending the document for work in the Commisions and we thus urge the President of the Dominican Republic to reject the new penal code and demonstrate the country’s commitment to conform its legislation to its international and human rights obligations. Women in the Dominican Republic have the right to exercise meaningful decision-making power over their lives, as well as the right to access safe and comprehensive healthcare services, as part of the State’s obligation to respect, protect and fulfill women’s rights. We at WGNRR will continue to stand in solidarity with SRHR advocates and WHRDs in the Dominican Republic who undertake the important work of advocating for women’s access to safe and legal abortion, so that all Dominican women live a life free from all forms of violence and discrimination.
Please consider signing the current petition for the rights of Dominican women and girls: http://alzatuvoz.org/porellas/ – it will automatically send messages to both the President of the Senate and President Medina asking them to reintroduce the text adopted in 2014.
La RMMDR Condena el Voto Reciente del Nuevo Código Penal de la Cámara de Diputados de República Dominicana sobre la Prohibición Total del Aborto.
La Red Mundial de Mujeres por los Derechos Reproductivos (RMMDR) recibe con consternación las noticias del reciente voto de la Cámara de Diputados República Dominicana de aprobar la reforma al código penal que elimina el párrafo propuesto relacionado al aborto y de este modo,criminaliza de nuevo el aborto en todos los casos.[1] El Presidente de República Dominica, Daniel Medina Sánchez, introdujo una enmienda al código penal en 2014,[2] un esfuerzo admirable por despenalizar el aborto en instancias cuando la salud o la vida de la mujer o la niña están en peligro, cuando el embarazo es resultado de una violación y cuando hay inviabilidad del feto fuera del útero. Recientemente sin embargo, la cámara de diputados tuvo la oportunidad de demostrar y reafirmar su compromiso a los derechos humanos de las mujeres, promulgando y manteniendo la enmienda.[3] Sin embargo, el 19 de Julio 2016, la cámara de diputados aprobó el lamentable nuevo código penal en el cual se penaliza a la mujer que busque servicios de aborto sería castigada con dos o tres años de cárcel, y la pena sería entre cuatro a diez años de prisión al que asista o ayude a provocar el aborto en una mujer, completamente eliminando la enmienda propuesta en 2014.
En caso de que se promulgue, el nuevo código penal afirmaría la penalización absoluta del aborto en el país, y sería un retroceso drástico en relación a la salud, los derechos y la vida de mujeres y niñas en la República Dominicana. Como ya ha sido afirmado en múltiples ocasiones por distintas instancias de derechos humanos[4], y como lo ha confirmado el Relatora Especial sobre las Violencia contra las Mujeres, la criminalización absoluta pone en riesgo la salud y la vida de mujeres y niñas.[5] La condición de ilegalidad del aborto ha llevado a muchas mujeres a recurrir a servicios de abortos clandestinos poniendo su vida e integridad personal y salud en riesgo, exacerbando la morbi-mortalidad materna.[6] Estas leyes limitan el trabajo de los prestadores de servicios de aborto, y también de las mujeres defensoras de los derechos humanos quienes trabajan para aumentar el acceso al aborto seguro, y como consecuencia tendrían miedo de ser criminalizado por su trabajo.
Además, el nuevo código penal va en contra de las normas internacionales de derechos humanos, tales como la Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra la Mujer (Convención de Belem do Pará)[7], y la Convención sobre la Eliminación de todas las formas de Discriminación Contra la Mujer (CEDAW)[8] las cuales han sido ratificadas por la República Dominicana. Organismos internacionales de derechos humanos han destacado que el obligar a una mujer a llevar a término un embarazo, aun cuando éste es resultado de una violación o amenaza la salud y la vida de la mujer, es comparable con un acto de tortura y constituye una violencia institucional.[9]
Congratulamos al Senado por haber enviado a trabajo en comisiones, lo cual abre una nueva posibilidad de consolidar la aprobación de las causales y exhortamos al presidente de la República Dominicana y a rechazar el Nuevo Código Penal, y mostrar el compromiso del país a que las legislaciones cumplan con sus obligaciones internacionales y de derechos humanos. Las mujeres en la República Dominicana ejerzan un poder real en la toma de decisiones respecto a sus vidas, y tengan acceso a servicios de salud de calidad, comprehensivo y seguro, como parte de la obligación del Estado de respetar, proteger y cumplir los derechos de las mujeres. Desde la RDMMR, expresamos nuestra solidaridad con los defensores DSSR y de los derechos humanos de las mujeres en la República Dominica quienes siguen haciendo trabajo importante con respeto a promover el acceso seguro y legal al aborto, para que todas las mujeres dominicanas puedan vivir una vida libre de todas las formas de violencia y discriminación.
[1] Notimerica, Noticia Diputados Republica Domicana Aprueba Penalization Aborto, July 20, 2016.
[2] Dominican Republic Penal Code, Nov. 18, 2014.
[3] Letter from WGNRR to President Danilo Medina dated June 27, 2016 (Spanish).
[4] Center for Reproductive Rights, The total criminalization of abortion in El Salvador; Amnesty International, Dominican Republic takes Women’s Rights back to 1884, Dec. 2015; Amnesty International, Abortion is not a crime, doctor warn governments, Nov. 2015.
[5] Special Rapporteur on violence against women, its causes and consequences, Ms. Rashida Manjoo – Addendum, para. 65, 66, U.N. Doc. A/HRC/17/26/Add.2 (Feb. 14, 2011); Special Rapporteur on torture and other cruel, inhuman and degrading treatment or punishment, para. 43, U.N. Doc. A/HRC/31/57 (Jan. 5, 2016).
[6] Guttmacher Institute, Induced Abortions Worldwide, May 2016.
[7] Convention on the Prevention, Punishment and Eradication of Violence Against Women Ratified by the Dominican Republic on the 3rd of July 1996.
[8] 1993 UN Declaration on the Elimination of Violence Against Women.
[9] Special Rapporteur on torture and other cruel, inhuman and degrading treatment or punishment, para. 44 and 72(b), U.N. Doc. A/HRC/31/57 (Jan. 5, 2016).